
El tiempo se derrite
en los años que pasan sigilosos,
por las vías oxidadas.
Contemplo la penumbra de mis últimos días,
Y me pregunto…
¿Dónde están los recuerdos de aquellos jóvenes días?
Pues aquí…
solo escucho eco de un cántico mermado en arena movediza.
Y mientras lo pienso una y otra vez…
El día ya se ha acabado.
©C. Feliciano-Avilés, 2020