Me seco como rosa en el desierto.
Me congelo, esperando a que el tiempo regrese por mi.
Y mientras la monotonía me agobia, me detengo frente a una vela ardiente, muy consumida. Me lleva a recordar…
La vehemencia de un viejo amor aquieta mi alma, por cortos periodos, me arrastra a la demencia. La locura abraza mis pensamientos, alucino. Su mirada avasalla mi corazón, lo hace pedazos.
¿Como despierto?
-Camila FA